Como cualquier habilidad, la práctica continua hace que sea más natural y fácil hacerlo. La mejor manera de que alguna actividad deseada se haga es convertirla en un hábito. La clave está en facilitar y ritualizar estas actividades y hacer que cueste el menor esfuerzo posible.
El proceso de construir buenos hábitos requiere voluntad y persistencia y dada nuestra tendencia natural a estar cómodos es fácil que ante cualquier obstáculo desistamos. El buscar formas de facilitar el proceso hace que disminuyan los obstáculos y aumenta la probabilidad de éxito en adquirir el nuevo hábito.
Cuando niño era esclavo de mis impulsos, ahora soy esclavo de mis hábitos … Og Mandino
Échenle señores!?